lunes, 28 de septiembre de 2009

PROTCOLO OLÍMPICO


El próximo día 2 de Octubre, sabremos si Madrid será sede de los juegos olímpicos de 2016.Organizar una Olimpiadas es muy complicado y el protocolo a seguir debe ser riguroso.

Los principios del Olimpismo


El Olimpismo es una filosofía de vida que exalta y combina en un conjunto armónico las cualidades del cuerpo, la voluntad y el espíritu. Su objetivo es aliar el deporte con la cultura y la educación, en la era moderna, el olimpismo como actividad cultural múltiple.

El Olimpismo se propone crear un estilo de vida basado en la alegría del esfuerzo, el valor del buen ejemplo y el respeto por los principios éticos fundamentales universales.

Favorecer el establecimiento de una sociedad pacífica y comprometida con el mantenimiento de la dignidad humana. El Movimiento Olímpico tiene por objetivo contribuir a la construcción de un mundo mejor y más pacífico, educando a la juventud a través del deporte practicando sin discriminación de ninguna clase y dentro del espíritu olímpico, que exige comprensión mutua, espíritu de amistad, solidaridad y juego limpio.

Toda forma de discriminación en contra de un país o de una persona, ya sea por motivos raciales, religiosos, políticos, de sexo o de otro tipo, es incompatible con la pertenencia al Movimiento Olímpico.

Normativa sobre protocolo olímpico


Sí, la Carta Olímpica que incluye todo el esquema organizativo y de protocolo. Es el documento de referencia en el que se deben basar los organizadores de los juegos y sus equipos de trabajo. En la Carta Olímpica se reflejan aspectos que contemplan desde la entrega de medallas y diplomas olímpicos hasta el envío de invitaciones pasando por las regulaciones sobre la bandera olímpica y la antorcha olímpica. No obstante, el país organizador tiene una amplia libertad para establecer sus pautas y criterios, sin más límite que respetar los preceptos señalados en la Carta Olímpica. Eso sí, desde el principio hasta el final de los Juegos Olímpicos, el COI será la única autoridad competente para establecer el protocolo aplicable en todos los sitios y en todas las ceremonias y manifestaciones, De hecho, durante los Juegos Olímpicos, la precedencia corresponderá a los miembros del COI y a los miembros honorarios del COI, por orden de antigüedad, con el Presidente y los vicepresidentes a la cabeza, seguidos de los miembros del COJO (del país organizador) y de los presidentes de las Federaciones internacionales.



La bandera olímpica


Fue adoptada en el Congreso de 1914, celebrado con motivo del vigésimo aniversario de la restauración de los Juegos. Fue estrenada en los Juegos Olímpicos de Amberes 1920.
Según el Comité Olímpico Internacional, los anillos olímpicos representan la universalidad de los Juegos, basados en la idea de que al menos uno de los seis colores de la bandera olímpica están en todas las banderas de los países del mundo.
Sin embargo, la idea de que cada anillo y su color representan a uno de los cinco continentes sigue siendo muy popular, aún cuando el COI lo rechaza.
En la actualidad existen cinco teorías. La más aceptada es la siguiente:
Azul:Europa
Amarillo: Asia
Negro: Africa
Verde : Oceanía
y Rojo : América

El tema de utilizar anillos está muy posiblemente basado en las ideas del psicoanalista suizo Carl Gustav Jung que decía que el círculo representa la continuidad y al ser humano.



¿Dónde debe estar situada?



Una bandera olímpica de grandes dimensiones deberá ondear, desde el principio hasta el final de los Juegos Olímpicos, en un mástil erigido en un emplazamiento bien visible del estadio principal, donde será izada durante la ceremonia de apertura y arriada durante la ceremonia de clausura de los Juegos Olímpicos. En la villa olímpica, así como los sitios de competición y de entrenamiento y todos los demás sitios que estén bajo la responsabilidad del país anfitrión, deberán estar decorados con gran profusión de banderas olímpicas. Además, las banderas olímpicas ondearán en gran número junto a las otras banderas en la ciudad anfitriona.


En un acto olímpico las banderasse ubican de la siguiente manera:
1.- Bandera del país organizador de los juegos (anfitrión).

2.- Bandera del origen (iniciador) de los juegos olímpicos (bandera de Grecia).

3.- Resto de países participantes: por riguroso orden alfabético en el idioma del país organizador.

4.- La bandera olímpica, en lugar destacado y fuera de la línea oficial de las banderas oficiales de los países participantes.


Cuando terminan los juegos el alcalde de la ciudad anfitriona se reunirá con el Presidente del COI sobre el estrado y le entregará la bandera olímpica. El Presidente del COI la entregará a su vez al alcalde de la ciudad anfitriona de los siguientes Juegos Olímpicos. Esta bandera deberá quedar expuesta en el principal edificio municipal de esta última ciudad. Si Todo sale bien el alcalde de Londres se la entregará a Ruiz Gallardón.


En las entregas de medallas a los participantes de las distintas pruebas, las banderas ondeará en el orden de clasificación de sus respectivos representantes, izándolas lentamente al compás de sus respectivos himnos nacionales. Quedarán colocadas en niveles distintos en función de la clasificación. La bandera que representa el primer clasificado en un nivel superior, la bandera representante del segundo clasificado, en un nivel ligeramente inferior al primero, y la tercera bandera en un nivel ligeramente inferior al del segundo clasificado.



Medallas olímpicas


El primer premio para el ganador de los antiguos juegos olímpicos fue una corona de olivo sagrado. Hoy es la medalla de oro. Ninguno de los participantes en la edición moderna de los Juegos Olímpicos en Atenas 1896 recbió una medalla de oro. El primer lugar recibía una medalla de plata y una corona de olivo; el segundo lugar recibía una medalla de bronce y una corona de laurel; el tercer lugar, simplemente se iba con las manos vacías.



La llama olímpica


La primera llama olímpica se encendió por primera vez en Amsterdam en 1928. La razón es que el arquitecto neerlandés Jan Wils incluyó en el dibujo del estadio olímpico una torre y tuvo la idea de encender en ella una llama durante los juegos. En la ceremonia de apertura, el 28 de julio de 1928, un empleado de la empresa eléctrica de Amsterdam encendió por primera vez la llama de los Juegos Olímpicos de la era moderna en la torre entonces llamada Marathontower (y que se quedó conocida localmente como “cenicero de la KLM”).
Cuatro años más tarde, en los Juegos Olímpicos de Verano de 1932, volvió a encenderse una llama durante los Juegos en el estadio de Los Angeles. Durante la ceremonia de clausura se presentó una cita de Pierre de Coubertin que decía: “Que la Antorcha Olímpica siga su curso a través de los tiempos para el bien de la humanidad cada vez más ardiente, animosa y pura”
En los Juegos Olímpicos de Berlín 1936, se realizó por primera vez una marcha de atletas para transportar una antorcha con la llama, desde las ruinas del templo de Hera en Olimpia, hasta el Estadio Olímpico de Berlín.

Actualmente se sigue con la tradición, pero ahora se busca una manera original y espectacular…


La llama olímpica deberá situarse en una posición elevada, claramente visible desde el interior del estadio principal y, cuando la arquitectura lo permita, igualmente visible desde el exterior del estadio.



El encendido de la llama en Barcelona fue espectacular…., pero hubo truco. Un arquero disparó una flecha en llamas hacia el pebetero. Bueno, eso creímos millones de personas. Resulta que la flecha pasó por arriba y salió del estadio, al tiempo que alguien encendía el pebetero en forma directa. Según dicen, así estaba planeado.



Continuaremos con el olimpismo....